José Ramón Martínez / Yecla.

De los brotes verdes al 'tijeretazo'

Este primer año que celebramos no parece que Zapatero haya sido la “fuerza nueva de la naturaleza” que España necesitaba. Poco después del alumbramiento de este medio de análisis y opinión se celebraron las elecciones al Europarlamento, que venció el PP. En aquella campaña nos hicimos eco del video electoral que preparó Pajín para celebrar la reducción del desempleo de mayo. Los “brotes verdes” de la economía o “lo peor ya ha pasado: empieza la recuperación” comenzaron a instalarse en el discurso del Gobierno.

Hoy las cosas han cambiado, tras el cónclave de Davos y, principalmente, el 7 de mayo. Lo que antes era blanco ahora es negro. La “salida social” a la crisis está muerta. Y es que Europa y Obama tiraron de las orejas a Zapatero para que empezase a hacer las reformas necesarias para que España no se hundiese y se llevase a Europa y el mundo con ella. El Gobierno aprobó el “tijeretazo” y próximamente seguirán cayendo las reformas del mercado laboral, pensiones, energía, sistema financiero y algunas más que Zapatero se negaba a hacer y que ahora le están exigiendo.

Este año será recordado como el del gran desgaste del Gobierno. Los españoles le reprochan su inacción y la mala gestión de la crisis. Tras el “tijeretezo”, que supuso la reducción de salario a funcionarios y la congelación de las pensiones, las encuestas otorgan una mayoría contundente al PP, cuando hace apenas un año los conservadores se colocaban por primera vez por encima de los socialistas en intención de voto. La clase política, los sindicatos y la patronal tampoco salen bien parados. Los primeros no han sido capaces de ponerse de acuerdo para tomar medidas contra la crisis y se han mostrado incapaces de encontrar soluciones. Los segundos –los sindicatos- han perdido un gran poder de convocatoria, como se pudo ver en las residuales manifestaciones del Primero de mayo y esta misma semana en la huelga de funcionarios. Y la patronal ha perdido mucha de la poca credibilidad que tiene con Díaz Ferrán al frente.

Gürtel y la corrupción

Uno de los asuntos estrella de este año ha sido la corrupción. Centrada especialmente en el PP y la trama de Correa y Álvaro Pérez, desarrollada principalmente en la Comunidad de Madrid y en la Comunidad Valenciana, es en este último lugar donde ha afectado a personajes más ilustres. Ha supuesto la destitución del secretario general de la formación regional, Ricardo Costa, y la sospecha de financiación ilegal en el partido de Camps, además de una imagen desoladora de lujo y corrupción en el Consell.

Pero no han sido los únicos. El 'caso Pretoria', 'el caso Matas' o, en las últimas semanas, las noticias sobre el presidente del Congreso multiplican la sombra de corrupción que cierne sobre una clase política que cuenta con una valoración popular pésima.

Garzón y Alakrana

Pero no sólo la economía y la corrupción han sido los protagonistas. El juez Garzón ha sido imputado por tres casos distintos de prevaricación –y próximamente lo imputarán por eliminar pruebas del caso Camps- uno de ellos referido a la causa del franquismo. Parece claro que se debe hacer Justicia, la duda es si es Garzón y la Administración de Justicia quien debe hacerlo o, por el contrario, debe ser labor del Gobierno.

Por otro lado, mucha polémica surgió al inicio del invierno con la liberación del Alakrana. Todavía no sabemos quién decidió traer a los dos piratas a España, si se intentó detener a los piratas tras la liberación, ni tampoco de dónde salió el dinero de la liberación. Y, por supuesto, nadie ha asumido ningún tipo de responsabilidad política. La voracidad de la actualidad ha hecho que queden en este asunto muchas cosas por resolver.

Política Internacional

En otro orden de cosas, en el panorama internacional debemos destacar las victorias de los conservadores en Alemania y Reino Unido. Otro de los hechos trascendentes de estos 12 meses fue la aprobación del Tratado de Lisboa –una miniconstitución europea- en un clima donde se ven más sombras que luces en el futuro del viejo continente. Los desastres en Haití y Chile también han marcado la escena internacional. Aunque con la crisis los escándalos de Berlusconi han perdido fuerza, en su día sus fiestas privadas colapsaron las portadas de los principales diarios.

Resulta complejo resumir un año político tan cargado de acontecimientos trascendentes como los que hemos vivido desde que 'Sin Hora De Cierre' se propuso ofrecer algo distinto a los lectores. Pero más difícil será, estoy convencido, hacer el análisis del segundo año de este humilde medio. ¿España generará empleo? ¿CiU ganará las elecciones catalanas? ¿Habrá un tsunami electoral en las municipales y autonómicas del próximo mayo? ¿Aprobará Zapatero los presupuestos? ¿Dimitirá o convocará elecciones anticipadas Zapatero? Nada de esto se sabe, lo que sí sabemos es que todo lo que ocurra lo seguiremos contando aquí.