Eduardo Masa / Madrid.

"Ojalá no sea una Liga de dos"

Hace unos días, el "loco" Gatti comentaba que las mujeres no saben de fútbol. Evidentemente no está en lo cierto. El claro ejemplo de su error se puede representar en Susana Guasch. Desde que "LaSexta" se lanzó a la aventura del fútbol, esta periodista de sonrisa inagotable ha sido una de las imágenes que enseguida se asocia al fútbol y el fin de semana. Sin duda una reportera a la altura de la "liga de las estrellas".

Echando la vista atrás, ¿te imaginabas con 10 años que acabarías siendo una de las voces del fútbol actual?
Cuando iba al fútbol con mi padre y mi hermano ni lo pensaba, claro. Tenía ocho años y es verdad que siempre me atrajo este mundo y el periodismo. Nunca tuve dudas de que quería ser periodista, pero lo que no imaginaba era que sería tan afortunada en poder dedicarme 24 horas a lo que me gusta. Para mi es más un hobby. He tenido lo suerte de ir a parar a la televisión que tiene los derechos de la Liga y de que hayan confiado en mi desde el primer día. Esta es mi cuarta temporada a pie de campo, y es como si fuera la primera.

De dónde nace todo esto de ser reportera...
Por mi afición al periodismo y alrededores. Desde pequeña que siempre me ha gustado mucho hablar, no me callo ni debajo el agua. Era de las que le gustaba salir a la pizarra en clase y dar charlas, pocas cosas me daban vergüenza. El día de mi comunión, con ocho años, pedí leer una lectura delante de todo el mundo, cuando los demás críos se escondían por no hacerlo. Siempre me ha gustado comunicar. Además, veía a mi padre lo bien que se lo pasaba y lo sigue haciendo, con su trabajo. Empecé con 19 años en un periódico y no he parado. He pasado por prensa, radio y ahora televisión y estoy encantada. Me dí cuenta rápido de qué era lo que quería hacer y que no me costaba desenvolverme. Me gusta ser reportera porque me da la oportunidad de viajar y conocer a gente, que es lo que más te enriquece, me gusta eso que llamamos 'la calle'. Y no me canso. Lo mejor de este trabajo es que cada día es nuevo, nunca sabes con qué te vas a encontrar o qué te va a pasar. Vamos, que no me aburro nada.

Siendo tu padre quién es, ¿se te han abierto las puertas del éxito más fácilmente?
El primer trabajo que tuve, en un periódico dedicado a la información del Espanyol, me lo consiguió mi hermano. Yo tenía 19 años, estudiaba la carrera, y él me presentó al director. ¡La única condición que me pusieron era que tenía que ser socia del club! Lo era y lo sigo siendo. Mi padre no se enteró hasta que vió un escrito con mi firma. ¡Él no quería que me dedicara a esto! Su sueño era que hubiera sido cardióloga, pero soy claramente de letras. Ahora está encantado, claro. ¡Pero no sabes lo que sufrí al principio! Siempre tienes que demostrar que vales más que los demás para que no te tachen de enchufada y esas cosas. Siempre he trabajado en sitios locales buscándome la vida. Hasta que mi padre me presentó a Antonio García Ferreras. Él me abrió las puertas de todo. Primero en la Cadena Ser, donde realicé la última beca antes de licenciarme, y luego me dio la oportunidad de la televisión. Primero en RealmadridTV y ahora en LaSexta, es el director de la cadena. Lo gracioso del tema es que llevo cuatro años trabajando en la competencia de mi padre, pues él está en Prisa.

Lo que siempre me ha dado mucha rabia es que la gente te juzgue por el apellido, sin pararse a pensar o interesarse en tu vida . Yo me lo tengo que currar día a día, y mi padre, a su edad, lo tiene todo hecho. Somos muy diferentes, ¡ya me gustaría a mi llegarle a la suela de los zapatos! Ser hija de Tomás Guasch tiene muchas ventajas porque cae bien a casi todo el mundo, así que mi apellido ayuda a que me conozca más la gente. Pero por el contrario, los que no le pueden ver también me relacionan con él y me meten en el mismo saco. No le puedes caer bien a todo el mundo, ni lo pretendo, pero cada uno es cada uno.

¿Cómo te llego la oportunidad de trabajar en "La Sexta"?
Como te decía, tuve mucha suerte porque cuando acabé la beca en la SER en Madrid, volví a mi casa, Barcelona. Estuve trabajando un año y medio en la radio y me llamó Ferreras para hacer un cásting en RealMadridTv. Él era entonces el director de comunicación del club. Hice de nuevo las maletas y me trasladé definitivamente. Al año y medio de trabajar en el canal del Madrid, nació LaSexta, ficharon a Ferreras como director y se nos llevó a unos cuantos para esta nueva aventura que ya dura cuatro años y que es lo mejor que me ha pasado laboralmente.

A día de hoy, te planteas la idea de ser locutora de fútbol.
¿Narrar? ¡Ni en broma! Aunque nunca se sabe, es lo último que haría. No tengo ni voz ni maneras para hacerlo. Deja, deja, que yo ya estoy bien como estoy.

Qué nos puedes contar de todas los rostros conocidos con los que compartes cadena.
Lo más gratificante de este trabajo es que conoces y llegas a entablar amistad con gente que jamás te hubieras imaginado. Me refiero a la gente cercana a mí como Valdano, Kiko Narváez, Antonio Maceda, Gica Craioveanu. Ex futbolistas que tú veías de joven en el estadio y nunca hubieras pensado que te irías luego con ellos de campo en campo a retransmitir partidos. A Kiko siempre le digo lo mismo: "parece mentira con lo que te quiero ahora y la de veces que te hubiera matado cuando te veía en Sarriá."

¿Cómo estas viendo la temporada?
Pinta que va a ser una prolongación de la pasada. Dudo que el Barça falle, lo hará pocas veces, y sigo viendo a un Madrid en formación. Con mucha pegada sí, pero que todavía no se ha acoplado en el juego. El Barça ha conseguido ser un bloque sólido, y al Madrid le va a llevar un tiempo. De todas formas, con el equipo que tiene, va a pelear la Liga hasta el final. Y espero que también lo haga el Sevilla, u otro. Ojalá no sea una liga de dos.

¿Quién es el jugador al que todavía no has entrevistado y más ilusión te haría?
Afortunadamente, he podido entrevistar a Raúl, Messi, Ibra, Cristiano Ronaldo, Zidane, Kaká, Messi, Roberto Carlos, Ronaldo, Figo, Beckham, Ronaldinho, Kun, Forlán, Villa, Luis Fabiano. A todos los últimos cracks mundiales, gracias a las cuatro temporadas que llevo en la Liga y en laSexta.. Pero también a veteranos como Gento, Biosca, Ramallets y, sobretodo, a Alfredo Di Stéfano. Pero me faltan Maradona y Pelé. Y tengo una espina clavada con Pep Guardiola. Desde que es entrenador, no concede entrevistas, y tengo muchas ganas de hablar con el hombre que ha convertido al Barça en el mejor equipo del mundo y al que todos quieren imitar.

Alguna anécdota con algún futbolista y que se pueda contar.
Nunca olvidaré el detalle que tuvo David Beckham antes de irse a jugar a Los Ángeles. Nos invitó a comer a dos compañeras de profesión y a mi, con su mujer y sus suegros para despedirse. Una semana después, nos mandó a cada una un ramo de rosas blancas enorme y una bolsa con productos de su línea de cosmética. Es el jugador más educado, caballero y cercano que he conocido, a pesar de todo lo que le rodea. Un crack.