Tamara Martínez / San Pedro del Pinatar.

Un título un tanto peculiar ¿no? Solamente tienen, queridos lectores, que poner un poco de música en sus cabezas y recodar la cabecera de un archiconocido programa televisivo de finales de los setenta.

Hace 40 años entraba a formar parte de la vida de lo norteamericanos, como muchas otras cosas, un revolucionario programa que si en 1969 hacía las maravillas de los hogares americanos, no fue hasta 1976 cuando llegó a la joven Televisión Española. Al principio los conocimos como “Ábrete Sésamo” pero tres años después se tradujo al conocido “Barrio Sésamo” y contó con actores españoles.

Este programa mezclaba a los conocidos Muppets (teleñecos: Coco, Caponata, Peggy…) con personajes de carne y hueso como Chema “el panadero” o Ana “la estudiante”.

Muchos hemos crecido con los amigos Epi y Blas, hemos aprendido a contar con el Conde Draco, nos hemos reído con las peripecias de Espinete e incluso nos entró el gusanillo para ser periodistas gracias a La Rana Gustavo. Aprendimos lo que era cerca y lejos, a contar hasta 10, a no diferenciar por colores a las personas (el barrio era toda una amalgama de colores y personajes), nos queríamos lavar los dientes al mismo tiempo que Espinete, nos hubiera encantado comer algún dulce de la panadería de Chema, haber cantado con Don Pim Pom cualquiera de sus canciones, comer tantas galletas como Triki o incluso intentar volar como Súper-Coco…

“Barrio Sésamo” no fue sólo un programa infantil, fue todo un método de educación que aunaba no solo la diversión como sistema de enseñanza de los más pequeños, sino que a través de imágenes rápidas, de mezclar canciones con cálculo, de incentivar la lectura, de hacer llegar desde la televisión ciertos valores éticos y morales, de enseñarnos lo que era la amistad consiguió ser el programa más longevo llegando hasta la 37ª temporada en antena.

Muchos han intentado “copiar” el formato, como ocurrió con los españoles Lunnis, que si bien consiguieron mucho éxito, el cosechado por estos vecinos siempre ha sido superior.

En Estados Unidos aún sigue en antena este programa, aunque ya no sea como aquel que comenzó hace 40 años, si que intentan mantener ese espíritu educativo del que partió la idea, y además cuentan con el beneplácito de la audiencia al contar en especiales, como en este cuarenta aniversario, con la primera dama norteamericana Michelle Obama o Tony Parker y señora.

A mi quién más me gustaba era Coco... ¿Y a vosotros?

¡Felices Cuarenta! Y a por otros 40 más