Ana Andújar / Murcia

Quien se sacara de la manga el Día de la Música está de enhorbuena: tiene toda la pinta de un éxito apabullante. No sólo se nos ofrece a los mortales un plan perfecto para un domingo de verano en plenos exámenes, sino que para la ocasión las productoras y patrocinadores han creado unos matrimonios (musicales) de conveniencia que ya los quisiera Tu media naranja.

Me refiero al disco especial que se ha grabado con el motivo de el Día Europeo de la Música, y que ofrece a grupos emergentes y asentados del indie (y no tanto) español la oportunidad de versionar canciones en parejas. El resultado, más delicioso que el chocolate que escurre de un gofre: Rockdeluxe regala el CD con su revista de junio y desde la web de El País se pueden descargar una a una las obras repintadas de estos artistas. Encontramos a Cohete y Remate versionando el Time to pretend de los MGMT en su linde más oscura, a Templenton y Alondra Bentley canturreando un edulcorado Crazy de Gnarls Barkley, o a Mendetz y a Marc de Dorian dándole caña a el First of the Gang to Die de Morrisey (que no sabemos si los más fanáticos podrán perdonar). Absolutamente sorprendente.

Además, Radio 3, Heineken y Fnac son las empresas responsables de inventarse un cartel para las principales provincias españolas que no tiene que no tiene que envidiar nada a un festival pop estival de esos que sangran el bolsillo. Liderando el cartel los principales grupos de la escena indie actual, Christina Rosenvinge, Vetusta Morla, Russian Red o Lori Meyers, junto a nuevas promesas de lo alternativo (los murcianos de moda, Klaus&Kinski y Alondra Bentley, Cuchillo, Joe Crepúsculo, Cohete o Extraperlo) se repartirán entre Madrid, Ourense, Barcelona y Valencia.

Pero queda cuerda para otras ciudades afortunadas: Bilbao recibirá a Los Punsetes y Esne Beltza, Marbella a La Habitación Roja y Hablando en Plata, Murcia a Cooper y Pájaro Sunrise, Málaga a Sr. Chinarro y The Right Ons y Sevilla se marcará unos bailes con Tokio Sex Destruction y Francisco Nixon.

En resumen, que los organizadores no quieren darnos ninguna excusa para perdérselos y por eso los conciertos son gratis, las descargas legales y los artistas no ofrecen su cuerpo por imposibilidad física del espacio-tiempo. Let´s celebrate.